Una casa o un departamento ambientalmente sostenible es un imán poderoso para un número cada vez mayor de compradores.
Si estás por vender tu unidad, y querés sumarle ese atractivo hay algunas acciones sencillas que podés poner en práctica ya mismo, vinculadas con 7 aspectos.
. Ahorro de energía
Instalar lamparitas LED de bajo consumo en todas las áreas de la vivienda, es la primera medida.
Además, nunca hay que dejar elementos de iluminación encendidos cuando un potencial comprador se acerca a visitar la unidad.
Eso da idea de derroche y poca conciencia ambiental, y de dejadez. Algo extra: todos los aparatos electrodomésticos deben ser desconectados porque aunque se encuentren no encendidos siguen consumiendo energía.
. Reducción del consumo de agua
Las pérdidas en las canillas y depósitos de los cuartos de baño no son un buen indicio para el visitante. Es urgente repararlos.
Otro aspecto a considerar es la instalación de reductores de caudal en las duchas, y el doble comando o descarga dual en los depósitos.
. Reciclaje
El adquirir cuatro cestos o tachos grandes para colocar allí los elementos de metal, papel, plástico y vidrio descartados que antes se tiraban a la basura, muestra que los dueños de la propiedad son personas responsables.
Es vital que esos cestos estén claramente identificados con carteles, y se encuentren limpios y ordenados.
Lógicamente, al menos una vez a la semana habrá que llevar su contenido a los puntos de reciclaje cercanos.
. Compostaje
Si se cuenta con un jardín, un pequeño patio o un balcón –sin importar sus dimensiones–, es posible instalar un área de compostaje para los residuos orgánicos. Son los restos de comida, papeles mojados y sucios, y otros elementos que no pueden reciclarse.
El compost que surge de allí resulta un excelente abono para las plantas.
. Eficiencia en la calefacción y la refrigeración
Un hogar con un buen aislamiento es otra señal favorable para la futura compradora o el potencial adquirente del inmueble.
Por ejemplo, las cortinas de tela gruesa ayudan a mantener el calor en invierno. En verano, se impone abrirlas para dejar que la luz natural invada los espacios.
. Irrigación
En el césped, los sistemas de riego automático permiten que se mantenga verde sin derrochar agua.
El riego manual con manguera si bien es más accesible económicamente, implica un tiempo que el propietario no siempre tiene y, sumado a ello, un gasto excesivo de agua.
. Forestación
Alguien dijo una vez: “Si te gusta el canto de los pájaros no compres jaulas, planta árboles”. Quien cuenta con una pequeña área verde en la propiedad, tiene la opción de plantar uno o más árboles.
Habrá que elegirlos en función del espacio disponible, y del crecimiento esperable de sus raíces.
Los árboles de hojas perennes, es decir, que no caen en otoño, son una opción a evaluar.
Algunas especies de ese tipo son el ciprés, el alcornoque, el olivo y el cedro del Líbano.
En todos los casos, conviene considerar aquellas que demanden escaso mantenimiento.
La conveniencia
La sostenibilidad no solo beneficia al planeta: también reduce el monto de las facturas de los servicios públicos.
De modo que esos cambios si no se hacen por convicción, pueden hacerse por conveniencia.
No hay cambios chicos
No existen cambios chicos ni grandes. Todos tienen un impacto positivo en el entorno, y fomentan hábitos más responsables en el día a día de los habitantes de un hogar.
Al mismo tiempo, son una enseñanza que los chicos rápidamente asimilan.
Poner en primer plano
El corredor inmobiliario hábil, y con experiencia, sabe que estas mejoras que se proponen tienen un relevante atractivo.
Por eso, a la hora de enviar al fotógrafo y videasta que hará las tomas para su sitio web, las redes y los portales inmobiliarios –como Zonaprop y Argenprop–, le pedirá que preste especial atención a esos puntos.
Son un aliciente más para el que busca otro hogar. A veces, incluso pueden constituir una fortaleza no tan común en las viviendas.
Para los hijos
Poner en práctica estas iniciativas es algo que trasciende la mera venta de una propiedad. Un proverbio que se atribuye a Mahatma Gandhi afirma: “La tierra no es una herencia de tus padres, es un préstamo a tus hijos”.