Transformar una casa o un departamento con el fin de venderlo a un mejor precio y más rápido, no siempre requiere de grandes inversiones.
Existen múltiples estrategias de bajo costo a fin de revitalizar un espacio, mejorar su funcionalidad y adaptarlo a las necesidades actuales.
Acá, te presentamos 10 ideas para efectuar cambios económicos que pueden hacer una gran diferencia en tu hogar.
1. Planificar
Antes de realizar cualquier cambio, es esencial planificar. Esto implica definir claramente qué áreas se desean transformar y cómo se utilizarán esos espacios.
La planificación ayuda a evitar gastos innecesarios, y asegura que las modificaciones sean funcionales y estéticamente agradables. Es recomendable hacer un listado de prioridades siempre.
2. Reorganizar los espacios
Una de las formas más efectivas y económicas de transformar un hogar es mediante la reorganización de los muebles. Por ejemplo, moviendo una biblioteca que está contra una pared del living, hacia el centro del ambiente para que funcione como separador de dos zonas.
Cambiar la disposición de los muebles modifica completamente la percepción del espacio. Al despejar áreas y también reducir la cantidad de muebles, se puede crear un ambiente más acogedor y funcional.
3. Pintar
La pintura es una de las maneras más accesibles de darle un nuevo aire a cualquier habitación.
Con una inversión relativamente baja, se cambia completamente la atmósfera de un espacio. Es aconsejable optar por colores neutros –blanco, gris– o claros que amplifiquen la luz natural y hagan que el ambiente se vea más amplio.
También se puede elegir pintar solo una pared para crear un punto focal, con un color vibrante –amarillo, verde, azul–.
4. Actualizar cortinas, almohadones y otros textiles
Los textiles son herramientas poderosas para renovar cualquier habitación sin gastar mucho. Cambiar cortinas, almohadones, mantas, cubrecamas, caminos y alfombras aporta frescura y color al hogar.
Es bueno jugar con diferentes texturas y diseños para también enriquecer visualmente el espacio. Por ejemplo, combinar tejidos como el lino con el algodón añade profundidad y carácter a la decoración.
5. Renovar los accesorios
Renovar las manijas de las puertas o los apliques lumínicos es un pequeño detalle con un gran impacto en la estética general del hogar.
6. Renovar la iluminación
Cambiar las lamparitas comunes por otras LED o las frías por otras cálidas, permite crear ambientes acogedores, funcionales.
Un ejemplo adicional: reemplazar una araña importante y clásica en un living con muebles de estilo inglés por una de diseño moderno, es un plus que impacta de entrada a la futura compradora o al potencial adquirente.
7. Usar espejos
Incorporar espejos en la decoración no solo es estético, sino que también puede hacer que los espacios pequeños parezcan más grandes, luminosos.
Los espejos situados frente a ventanas o en pasillos oscuros ayudan a reflejar la luz natural, creando una sensación de amplitud.
8. Emplear revestimientos económicos
Si lo que se busca es cambiar el aspecto de los pisos o de las paredes sin realizar obras costosas, es factible usar revestimientos como el papel pintado o el microcemento. Se trata de materiales que son fáciles de aplicar, y capaces de transformar significativamente un ambiente sin necesidad de una reforma completa.
9. Sumar plantas
Las plantas tienen una doble función. Mejoran la estética del hogar y también contribuyen a un ambiente más saludable porque purifican el aire.
Por otro lado, con eso la vivienda se une a la tendencia de la biofilia, que consiste en incorporar elementos de la naturaleza al hogar.
10. Apelar al reciclaje creativo
El reciclaje creativo consiste en restaurar o pintar muebles antiguos –sillas, mesas, baúles– para darles una nueva vida. Y hacer que se integren perfectamente en la decoración actual.
Los muebles de otras épocas son una excelente forma de ahorrar dinero mientras se le añade carácter al hogar.
Cambiar por fuera es también cambiar por dentro
“Cuando un ser humano cambia su mentalidad interna, puede cambiar los aspectos externos de su vida”, dijo William James, filósofo y psicólogo estadounidense.
Sin embargo, otros expertos dicen que es justo al revés: los cambios en el “afuera” potencian los que se pueden dar en el “adentro”.