“Pienso, luego existo” y los ejes cartesianos son los dos “hits” filosóficos y matemáticos que le dieron prestigio a René Descartes, un sabio francés que vivió entre 1596 y 1650. Su obra cumbre es el “Discurso del Método”.
¿Cómo se puede vincular eso con la decisión de mudarse? ¿Y para que te puede servir a vos, que quizás estás planeando pasar a una casa más grande o con menos parque, o a un departamento con bajas expensas? ¿O, tal vez, cerca de las personas que más querés o de tu lugar de trabajo?
Aquí te damos algunas pistas que te van a ayudar, sin dudas, a decidirte a dar ese ese gran paso que buscás llevar a cabo.
Reflexionar y planificar
Descartes –palabra que se pronuncia aproximadamente así: “decár”– escribió el “Discurso del Método” en 1637. En él plantea la importancia de reflexionar y planificar.
El erudito francés propone dudar metódicamente y analizar cuidadosamente cada tema, para establecer conocimientos sólidos.
En sentido similar, quien decide mudarse debe reflexionarse sobre los motivos, evaluar las circunstancias, considerar los pros y los contras de ese paso.
¿Se muda porque lo desea o se ve obligado a hacerlo? ¿Es un proyecto postergado por muchos años? ¿Su familia está de acuerdo o no? Y si no lo estuviera, ¿por qué motivo?
¿Qué ganarán y qué perderán esa persona y los suyos al mudarse? ¿Le preocupa al vendedor extrañar luego su actual barrio o está abierto a lo nuevo? ¿Sabe cómo planificar la venta y la mudanza, sin que ambas tareas se conviertan en algo pesado?
Proceso de cambio
Tanto seguir el Método cartesiano como tomar la decisión de cambiar de hogar conllevan un proceso de cambio.
Descartes propone en su tesis abandonar las creencias que no tienen fundamento y construir un conocimiento basado en las evidencias. Es decir: lo central son los hechos, no las opiniones.
En el plano de la mudanza, cambiar de casa o de departamento implica dejar a un lado ciertas costumbres y condicionantes –como ciertos vecinos ruidosos o agresivos–, y zambullirse en una nueva experiencia de vida. Es un proceso que exige ganas de adaptarse a lo no habitual, salir de la rutina, escapar de la siempre plácida zona de confort.
La libertad
Descartes pone mucho énfasis en la importancia de la libertad de pensamiento, la capacidad de cada ser humano de llegar a conclusiones propias.
De igual modo, la decisión de mudarse conlleva un acto de autonomía por parte de las personas. Quien se embarca en la venta de su propiedad y la posterior mudanza a otro inmueble, elige el lugar donde va a vivir desde ese momento. En ambos aspectos hay una fuerte presencia del ejercicio de la voluntad.
Otro filósofo, pero esta vez proveniente de Grecia, Aristóteles, dice: “El que ha superado sus miedos será verdaderamente libre”.
Los tres pasos
El “Discurso del Método” es un libro de pocas páginas –en algunas ediciones, 80, y en otras, 90–, que se destaca por su claridad y poder de síntesis.
El Método cartesiano se centra en tres pasos. Ellos son:
. El primero: “No recibir nunca cosa alguna como verdadera que yo no conociese evidentemente como tal: es decir, en evitar cuidadosamente la precipitación y la prevención”. Para quien va a mudarse, esto puede utilizarse como un consejo a la hora de elegir el corredor inmobiliario. Es algo que nunca debe hacerse con apuro.
. “El segundo, en dividir cada una de las dificultades que examinara en tantas partes como fuere posible y como se requiriera para resolverlas mejor”. Aquí, la frase le sirve a quien planea cambiar de propiedad el no abrumarse con todo lo que ello implica sino trazar un plan, anotando cada tarea a desarrollar y concentrándose en su ejecución.
. “El tercero, en conducir con orden mis pensamientos, empezando por los objetos más simples y más fáciles de conocer, para ascender poco a poco, gradualmente, hasta el conocimiento de los más compuestos, e incluso suponiendo un orden entre los que no se preceden naturalmente unos a otros”. En este caso, el principio sugiere para quien se propone mudarse comenzar por las tareas sencillas y solo después pasar a las más complejas.
La vigencia del “Discurso del Método” es indudable. Y lo mismo su aplicabilidad no solo al tema del cambio de propiedad, sino a distintos órdenes de la vida.