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Mudarse es comenzar de nuevo, es ordenar y decorar una propiedad como a uno realmente le gusta que se vea, y es, sobre todo, hacer cambios vitales que no era posible en el antiguo departamento o la anterior casa.
También, mudarse es una tarea que puede resultar sencilla si se toman en cuenta algunos trucos.
1. Aprovechar para tirar, regalar y donar cosas
Una mudanza constituye, en casi todos los casos, un cambio de vida. Aunque la nueva casa o el flamante departamento esté a cuatro cuadras del que se va a dejar.
Ese cambio de vida implica, también animarse a tirar, regalar y donar objetos. Desde ropa de esquí que ya no se utiliza hasta bandejas para la cama, de las que se tienen tres casi idénticas.
El desprenderse de elementos simplifica la mudanza. Y reduce su costo ya que ello puede ser igual a uno, dos o cinco canastos menos que transportar.
2. Empezar cuanto antes
Dejar el embalaje de los elementos a mudar para el final, es un error: solo sirve para aumentar la tensión en el día clave.
Es preciso comenzar a guardar cuanto antes. ¿Por dónde empezar? Por las cosas que no se usan a diario y que suelen estar en los estantes menos accesibles.
Por ejemplo, la ropa de la próxima estación. O los juguetes de la infancia de los hijos.
Todo lo que pueda acelerarse antes de la fecha de la llegada del camión de mudanza, equivale a minutos valiosos que se aprovecharán mejor en esa jornada crucial.
3. Dar aviso a todos
Es vital que los familiares, amigos, proveedores, clientes y empleadores conozcan la dirección del nuevo inmueble lo más rápido posible. Y eso hay que realizarlo previamente a la mudanza.
También es precioso avisar a las empresas que hacen envíos habituales o mandan facturas impresas, revistas y demás elementos.
Si se recibe el diario cada día o los fines de semana, es vital también notificar a la persona encargada de esa tarea.
4. Visitar varias veces el nuevo barrio
Ir a visitar unas cuantas veces el barrio en el que se encuentra la propiedad a la que uno se mudará, permite reducir el estrés que conlleva arribar a un lugar nuevo y entrar en sintonía con él.
Por ejemplo, las visitas sirven para saber dónde quedan los supermercados cercanos, las clínicas y farmacias, la comisaría, los distintos comercios como ferreterías y verdulerías, los centros deportivos, las plazas y otros lugares de ocio.
Llegar a un ámbito nuevo siempre implica una adecuación que parece simple pero no lo es. Esto también puede hacerse con Google Street View, pero nunca reemplaza a la visita física.
Siempre hay algún familiar o amigo que tiene ganas de ayudar en la mudanza. O adolescentes que lo harán a cambio de un pequeño pago.
Es precio contactarse con ellos con antelación e informarles cuándo se producirá el traslado al nuevo hogar.
5. Pedir ayuda para el día de la mudanza
Si los medios económicos lo permiten, es bueno contar con el servicio de un moving planner, que se encarga de todos los aspectos de una mudanza. Desde embalar los platos hasta dejar el cepillo de dientes colocado en su exacto lugar en el nuevo baño, como aseguran algunos de ellos.
6. Delegar el cuidado de mascotas y niños
Realizar una mudanza si se tienen niños o mascotas, exige una especial atención hacia ellos y menos atención a cada detalle del traslado.
Por eso es muy recomendable que una persona se ocupe de su cuidado mientras se haga la mudanza.
Hay que recordar que también los chicos y las mascotas pueden sufrir un poco el estrés del cambio.
7. Dejar la limpieza para el final
No tiene quizás demasiado sentido ordenar y limpiar a la vez.
Lo mejor es primero embalar y luego, cuando la propiedad está vacía, encargarse de su higiene.
También aquí es bueno contar con la ayuda de otra persona: una mudanza exige un esfuerzo poco usual y vale la pena que alguien dé una mano.
8. Hacer todo en una sola jornada
Hacer la mudanza es un solo día reduce la ansiedad que ello produce en algunas personas. No todas, porque algunas disfrutan de ese momento y lo toman con optimismo.
Importante: ciertas familias tienen la suerte de no verse obligadas a dejar su antiguo inmueble de modo urgente. Pero eso que parece una ventaja, en realidad no lo es.